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Leopoldo López y Lilian Tintori: su nueva vida en Madrid en la ‘little Venezuela’

EFE

El líder opositor venezolano ya está instalado en la capital con su mujer y sus tres hijos, además de estar cerca de sus padres, que ya llevan varios años aquí

Juanra López

ra uno de los momentos más ansiados por la familia y lo han logrado. Leopoldo López, su mujer, Lilian Tintori, y sus tres hijos ya están juntos en Madrid. El líder opositor venezolano llegaba a la capital el pasado domingo 25 de octubre tras una larga travesía que empezaba en Caracas y proseguía por barco hasta la isla holandesa de Aruba, para después volar hasta Miami y desde allí a nuestro país. Una ruta que han utilizado otros disidentes venezolanos (y su propia mujer en junio del año pasado) y que le ha permitido comenzar una nueva etapa en su vida, en la que seguirá luchando contra el régimen de Nicolás Maduro, como subrayaba exultante su mujer, quien es una activista que lucha por los derechos humanos.

Era Lilian quien compartía en su perfil de Instagram la foto más elocuente y que mejor ejemplificaba la felicidad familiar. Tiene más de tres millones y medio de seguidores, lo que la convierte en una influencer que supera otras cifras astronómicas de celebrities españolas como Paula Echevarría (3,3 millones) o Dulceida (2,9), lo que nos permite hacernos una idea de su enorme predicamento y de la gran difusión que alcanza su mensaje.

El presidente de la Asamblea Nacional de Venezuela, Juan Guaidó, junto a Lilian Tintori, el pasado mes de enero en Madrid. (EFE)
El presidente de la Asamblea Nacional de Venezuela, Juan Guaidó, junto a Lilian Tintori, el pasado mes de enero en Madrid. (EFE)

Es esta red social la que nos permite estar al tanto también del devenir de su día a día en Madrid, donde está plenamente integrada y arropada por amigos compatriotas, que, como ella, se han instalado en el barrio de Salamanca, uno de los más elitistas de la capital (el precio por metro cuadrado puede alcanzar los siete mil euros) y que algunos han denominado la ‘little Venezuela’ o ‘little Caracas’. Son muchos los nombres propios, algunos con enorme proyección pública (Margarita Vargas, mujer de Luis Alfonso de Borbón, o Raquel Bernal, exmujer de Álvaro Muñoz Escassi, por poner algún ejemplo), que viven o han vivido en algunas de las calles y edificios más codiciados de la capital, como la también vecina zona de Los Jerónimos. También numerosos empresarios y miembros de ilustres sagas venezolanas han invertido aquí, que gozan de un absoluto anonimato. Muchos de ellos adeptos al régimen chavista y otros, por el contrario, opositores.

Es habitual ver a Lilian con sus hijos en uno de los pulmones verdes de Madrid, en el Retiro, como ella misma ha dejado de manifiesto en su perfil de Instagram. En estos meses de pandemia ha estado particularmente volcada en los niños, que echaban mucho de menos a su padre, con quien no pudieron celebrar su 49 cumpleaños el pasado 29 de abril, en uno de los momentos más duros del confinamiento. La activista narraba así su día a día: «¡Las mamás hacemos de todo! Mercado, cocinar, limpiar, ordenar, tareas con los niños, llevar una rutina dinámica sana y alegre para mis tres hijos. He aprendido y ahora me toca hacer cosas nuevas del hogar. Y acompañar a distancia a mis suegros queridos».

La primera comunión de su hija

Como decimos, son tres los hijos de Leopoldo y Lilian, que tampoco pudieron celebrar juntos su decimotercer aniversario de bodas el pasado 19 de abril: Manuela Rafaela, que nació el 19 de septiembre de 2009; Leopoldo Santiago, que vino al mundo el 10 de enero de 2013, y Federica Antonieta, que cumplía dos años el pasado 22 de enero. Precisamente hace tan solo una semana ambos compartían en sus redes sociales una imagen de un feliz acontecimiento familiar que se perdió, con gran tristeza, el líder venezolano: la primera comunión de su hija Manuela. Desde la distancia le dedicaba un emotivo mensaje: «Nuestra familia es muy creyente. Practicante. Lilian y yo a lo largo de los años hemos desarrollado una relación con Dios que nos ha ayudado a fortalecer el alma, a tener mucha fe para enfrentar los momentos difíciles que nos ha tocado vivir. Esa fe se la trasladamos a nuestros hijos día a día. Hoy, hija amada, tus oraciones se harán más fuertes y tu relación con Dios padre será más firme, más cercana. A pesar de la distancia, Manuela, estoy contigo siempre, en cada instante».

El matrimonio, en la residencia del embajador español de Caracas en mayo del año pasado. (Reuters)
El matrimonio, en la residencia del embajador español de Caracas en mayo del año pasado. (Reuters)

Una ceremonia religiosa que tenía lugar en la parroquia de San Manuel y San Benito, un espectacular templo de estilo neobizantino de algo más de cien años de historia, situado en la calle de Alcalá, frente al Retiro, a donde se desplazaban después del sacramento para hacerse unas fotos. Unas circunstancias que servían a Lilian para formular públicamente un deseo que se ha hecho realidad: «Hoy Jesús está más cerca de ti, hoy reafirmas tu fe y la fuerza de tu oración se eleva. Y estamos seguros que nos va a ayudar a reencontrarnos como familia, nuestra familia y todas las familias venezolanas».

Pasión familiar por el deporte

Gran amiga de Cayetana Álvarez de Toledo («Admiro tu profunda generosidad, tu entrega y dedicación como madre», dice de ella), Lilian ha estado muy arropada, especialmente por la familia de su marido, desde su llegada en España, donde, salvo un giro vertiginoso de los acontecimientos, está asentando su vida a corto y medio plazo. Ahora por fin todos juntos. Sin perder de vista el país que han tenido que abandonar, que es una referencia constante en la mayor parte de sus posts en Instagram.

A Lilian le encanta la vida al aire libre, algo que le permite la ubicación de su casa, tan cercana al Retiro. Es una consumada deportista, no en vano es campeona nacional de kitesurf, el ciclismo («Cuando monto bicicleta con mis hijos disfruto el triple, literalmente, cuando estoy con ellos») y el running. «Correr me mantiene activa, positiva y llena de esperanza», ha desvelado. Una pasión por el ejercicio físico que han heredado sus hijos mayores (la pequeña no ha alcanzado la edad para practicarlo), como ella misma comentaba cuando su primogénita cumplía once años: «Eres una atleta, amante de los animales y enamorada de tu país Venezuela, llevas siempre tu bandera donde sea y nos llenas de orgullo en cada momento difícil. Así eres, una niña fuerte, que te ríes y sigues adelante, que sabes que ‘el que se cansa pierde’ no es solo una frase, es nuestra forma de vivir.» También subrayaba las cualidades de su hijo en este sentido recientemente: «Eres un gran deportista, debes seguir practicando con constancia para ser el mejor».

Y no queremos acabar el recorrido por la vida cotidiana de la familia sin recoger unas emotivas palabras sobre la pequeña de la casa que le dedicaba su madre recientemente. Un mensaje en el que se hacía patente lo que echaba de menos a su marido, que permanecía desde abril del año pasado en la residencia de Jesús Silva, el embajador español en Caracas, antes de escapar y llegar a nuestro país: «Siempre con una sonrisa en la cara, estas últimas semanas está haciendo sus primeras frases como ‘Mami, vamos parque, parque abrieron Mami, parque abrieron’. Es muy emocionante oírla hablar. Estos meses para las familias y padres han sido diferentes, de mucha adaptación, tolerancia y solidaridad, pero para los más chiquitos una bendición tener 100% atención y presencia de su mamá y hermanos, y en nuestro caso de su papá por la pantalla».

Los padres de Leopoldo, felices

Con la llegada de Leopoldo se acaba un proceso de reunificación familiar que empezó en junio del año pasado cuando Liliana escapó de la residencia del embajador español en la capital venezolana, acompañada por su hija menor, que entonces tenía dieciséis meses. Los dos mayores ya vivían en España, al igual que sus abuelos paternos, Leopoldo López Gil, eurodiputado del Partido Popular, y su mujer, Antonieta Mendoza de López, quien trabaja actualmente en Llorente y Cuenca, asesoría especializada en comunicación, gestión de la reputación y asuntos públicos. Mantiene una excelente relación con su nuera y coordinó con ella toda una estrategia de visibilización de la situación de su hijo cuando fue condenado a 14 años de prisión domiciliaria, además de ser claves en la oposición a Nicolás Maduro.

Leopoldo López Gil, con Paloma Segrelles y Pablo Casado. (EFE)
Leopoldo López Gil, con Paloma Segrelles y Pablo Casado. (EFE)

Así mostraba el político su alegría en Twitter por este acontecimiento familiar, también con una enorme trascendencia para Venezuela: «Muy feliz de reunirme con mi hijo en Madrid y disfrutar su libertad en compañía de la familia. Gracias a España por su apoyo consecuente a los principios democráticos».

Fuente https://www.vanitatis.elconfidencial.com/celebrities/2020-10-27/leopoldo-lopez-lilian-tintori-vida-madrid-hijos_2807968/

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EFE

El líder opositor venezolano ya está instalado en la capital con su mujer y sus tres hijos, además de estar cerca de sus padres, que ya llevan varios años aquí

Juanra López

ra uno de los momentos más ansiados por la familia y lo han logrado. Leopoldo López, su mujer, Lilian Tintori, y sus tres hijos ya están juntos en Madrid. El líder opositor venezolano llegaba a la capital el pasado domingo 25 de octubre tras una larga travesía que empezaba en Caracas y proseguía por barco hasta la isla holandesa de Aruba, para después volar hasta Miami y desde allí a nuestro país. Una ruta que han utilizado otros disidentes venezolanos (y su propia mujer en junio del año pasado) y que le ha permitido comenzar una nueva etapa en su vida, en la que seguirá luchando contra el régimen de Nicolás Maduro, como subrayaba exultante su mujer, quien es una activista que lucha por los derechos humanos.

Era Lilian quien compartía en su perfil de Instagram la foto más elocuente y que mejor ejemplificaba la felicidad familiar. Tiene más de tres millones y medio de seguidores, lo que la convierte en una influencer que supera otras cifras astronómicas de celebrities españolas como Paula Echevarría (3,3 millones) o Dulceida (2,9), lo que nos permite hacernos una idea de su enorme predicamento y de la gran difusión que alcanza su mensaje.

El presidente de la Asamblea Nacional de Venezuela, Juan Guaidó, junto a Lilian Tintori, el pasado mes de enero en Madrid. (EFE)
El presidente de la Asamblea Nacional de Venezuela, Juan Guaidó, junto a Lilian Tintori, el pasado mes de enero en Madrid. (EFE)

Es esta red social la que nos permite estar al tanto también del devenir de su día a día en Madrid, donde está plenamente integrada y arropada por amigos compatriotas, que, como ella, se han instalado en el barrio de Salamanca, uno de los más elitistas de la capital (el precio por metro cuadrado puede alcanzar los siete mil euros) y que algunos han denominado la ‘little Venezuela’ o ‘little Caracas’. Son muchos los nombres propios, algunos con enorme proyección pública (Margarita Vargas, mujer de Luis Alfonso de Borbón, o Raquel Bernal, exmujer de Álvaro Muñoz Escassi, por poner algún ejemplo), que viven o han vivido en algunas de las calles y edificios más codiciados de la capital, como la también vecina zona de Los Jerónimos. También numerosos empresarios y miembros de ilustres sagas venezolanas han invertido aquí, que gozan de un absoluto anonimato. Muchos de ellos adeptos al régimen chavista y otros, por el contrario, opositores.

Es habitual ver a Lilian con sus hijos en uno de los pulmones verdes de Madrid, en el Retiro, como ella misma ha dejado de manifiesto en su perfil de Instagram. En estos meses de pandemia ha estado particularmente volcada en los niños, que echaban mucho de menos a su padre, con quien no pudieron celebrar su 49 cumpleaños el pasado 29 de abril, en uno de los momentos más duros del confinamiento. La activista narraba así su día a día: «¡Las mamás hacemos de todo! Mercado, cocinar, limpiar, ordenar, tareas con los niños, llevar una rutina dinámica sana y alegre para mis tres hijos. He aprendido y ahora me toca hacer cosas nuevas del hogar. Y acompañar a distancia a mis suegros queridos».

La primera comunión de su hija

Como decimos, son tres los hijos de Leopoldo y Lilian, que tampoco pudieron celebrar juntos su decimotercer aniversario de bodas el pasado 19 de abril: Manuela Rafaela, que nació el 19 de septiembre de 2009; Leopoldo Santiago, que vino al mundo el 10 de enero de 2013, y Federica Antonieta, que cumplía dos años el pasado 22 de enero. Precisamente hace tan solo una semana ambos compartían en sus redes sociales una imagen de un feliz acontecimiento familiar que se perdió, con gran tristeza, el líder venezolano: la primera comunión de su hija Manuela. Desde la distancia le dedicaba un emotivo mensaje: «Nuestra familia es muy creyente. Practicante. Lilian y yo a lo largo de los años hemos desarrollado una relación con Dios que nos ha ayudado a fortalecer el alma, a tener mucha fe para enfrentar los momentos difíciles que nos ha tocado vivir. Esa fe se la trasladamos a nuestros hijos día a día. Hoy, hija amada, tus oraciones se harán más fuertes y tu relación con Dios padre será más firme, más cercana. A pesar de la distancia, Manuela, estoy contigo siempre, en cada instante».

El matrimonio, en la residencia del embajador español de Caracas en mayo del año pasado. (Reuters)
El matrimonio, en la residencia del embajador español de Caracas en mayo del año pasado. (Reuters)

Una ceremonia religiosa que tenía lugar en la parroquia de San Manuel y San Benito, un espectacular templo de estilo neobizantino de algo más de cien años de historia, situado en la calle de Alcalá, frente al Retiro, a donde se desplazaban después del sacramento para hacerse unas fotos. Unas circunstancias que servían a Lilian para formular públicamente un deseo que se ha hecho realidad: «Hoy Jesús está más cerca de ti, hoy reafirmas tu fe y la fuerza de tu oración se eleva. Y estamos seguros que nos va a ayudar a reencontrarnos como familia, nuestra familia y todas las familias venezolanas».

Pasión familiar por el deporte

Gran amiga de Cayetana Álvarez de Toledo («Admiro tu profunda generosidad, tu entrega y dedicación como madre», dice de ella), Lilian ha estado muy arropada, especialmente por la familia de su marido, desde su llegada en España, donde, salvo un giro vertiginoso de los acontecimientos, está asentando su vida a corto y medio plazo. Ahora por fin todos juntos. Sin perder de vista el país que han tenido que abandonar, que es una referencia constante en la mayor parte de sus posts en Instagram.

A Lilian le encanta la vida al aire libre, algo que le permite la ubicación de su casa, tan cercana al Retiro. Es una consumada deportista, no en vano es campeona nacional de kitesurf, el ciclismo («Cuando monto bicicleta con mis hijos disfruto el triple, literalmente, cuando estoy con ellos») y el running. «Correr me mantiene activa, positiva y llena de esperanza», ha desvelado. Una pasión por el ejercicio físico que han heredado sus hijos mayores (la pequeña no ha alcanzado la edad para practicarlo), como ella misma comentaba cuando su primogénita cumplía once años: «Eres una atleta, amante de los animales y enamorada de tu país Venezuela, llevas siempre tu bandera donde sea y nos llenas de orgullo en cada momento difícil. Así eres, una niña fuerte, que te ríes y sigues adelante, que sabes que ‘el que se cansa pierde’ no es solo una frase, es nuestra forma de vivir.» También subrayaba las cualidades de su hijo en este sentido recientemente: «Eres un gran deportista, debes seguir practicando con constancia para ser el mejor».

Y no queremos acabar el recorrido por la vida cotidiana de la familia sin recoger unas emotivas palabras sobre la pequeña de la casa que le dedicaba su madre recientemente. Un mensaje en el que se hacía patente lo que echaba de menos a su marido, que permanecía desde abril del año pasado en la residencia de Jesús Silva, el embajador español en Caracas, antes de escapar y llegar a nuestro país: «Siempre con una sonrisa en la cara, estas últimas semanas está haciendo sus primeras frases como ‘Mami, vamos parque, parque abrieron Mami, parque abrieron’. Es muy emocionante oírla hablar. Estos meses para las familias y padres han sido diferentes, de mucha adaptación, tolerancia y solidaridad, pero para los más chiquitos una bendición tener 100% atención y presencia de su mamá y hermanos, y en nuestro caso de su papá por la pantalla».

Los padres de Leopoldo, felices

Con la llegada de Leopoldo se acaba un proceso de reunificación familiar que empezó en junio del año pasado cuando Liliana escapó de la residencia del embajador español en la capital venezolana, acompañada por su hija menor, que entonces tenía dieciséis meses. Los dos mayores ya vivían en España, al igual que sus abuelos paternos, Leopoldo López Gil, eurodiputado del Partido Popular, y su mujer, Antonieta Mendoza de López, quien trabaja actualmente en Llorente y Cuenca, asesoría especializada en comunicación, gestión de la reputación y asuntos públicos. Mantiene una excelente relación con su nuera y coordinó con ella toda una estrategia de visibilización de la situación de su hijo cuando fue condenado a 14 años de prisión domiciliaria, además de ser claves en la oposición a Nicolás Maduro.

Leopoldo López Gil, con Paloma Segrelles y Pablo Casado. (EFE)
Leopoldo López Gil, con Paloma Segrelles y Pablo Casado. (EFE)

Así mostraba el político su alegría en Twitter por este acontecimiento familiar, también con una enorme trascendencia para Venezuela: «Muy feliz de reunirme con mi hijo en Madrid y disfrutar su libertad en compañía de la familia. Gracias a España por su apoyo consecuente a los principios democráticos».

Fuente https://www.vanitatis.elconfidencial.com/celebrities/2020-10-27/leopoldo-lopez-lilian-tintori-vida-madrid-hijos_2807968/

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