Por Yenili Almeida
La comunidad booktubers, que gana cada vez más adeptos en el país, pretende fomentar el hábito de la lectura de una manera ingeniosa. Reclama más apoyo de las editoriales
No superan los 26 años de edad, son venezolanos y siempre cargan un libro bajo el brazo. Su amor por la lectura los conminó a llevar su pasión a otro nivel y ahora suben videos a Youtube para compartir sus opiniones y hacer sugerencias a otros jóvenes, y no tanto, interesados en la literatura.
Los booktubers venezolanos siguen una tendencia que ha tenido mucha resonancia en México, España, Colombia, Perú y Ecuador, pero no se puede decir lo mismo de Venezuela. Algunos dicen que el alto costo de los libros no permite que el lector pueda adquirirlos con frecuencia, mientras otros alegan que este fenómeno nacido en la era digital no ha tenido el mismo apoyo y difusión que en otros países del continente. Lo cierto es que no se desaniman y apuestan por difundir su contenido y alcanzar, en un futuro, los números de las reconocidas Juliana Zapata o Macarena Yannelli.
Numéricamente, la diferencia es notable. Zapata es una booktuber colombiana que tiene 63.000 suscriptores en su canal. Yannelli es argentina y lidera la lista de su país con 22.000 personas conectadas, seguidas por el también argentino Matías Gómez con casi 14.00 suscripciones. Las palabras de Fa es el nombre del canal Youtube de la joven mexicana Fa Orozco, quien acumula 323.000 suscriptores. Ha participado en ferias de libro en su país y es referencia para los jóvenes lectores. Las editoriales mexicanas se apoyan en ella para difundir sus nuevos libros
En Venezuela Johnny Cristina Scipioni, una joven de 26 años de edad que vive en Puerto Ordaz, es quien tiene la mayor cantidad de suscriptores en su canal homónimo. Comenzó hace poco más de dos años, mejoró la producción de sus videos y ha diversificado su lectura. Ahora intenta comentar la literatura clásica, poco frecuente en booktuber, con los famosos libros juveniles. A pesar de que es la más conocida, su canal no supera los 2.300 suscriptores.
Dewars Bracho tiene un año y medio en la comunidad, es diseñador gráfico y vive en Maracaibo. Se enorgullece en decir que es booktuber y que utiliza los conocimientos que aprendió en su carrera para editar sus videos en su canal Hablando de books. Asegura que una de las cosas que más se les dificulta es la difusión. “Los venezolanos leen mucho, pero no utilizan las redes sociales como soporte para la literatura. En muchos casos se dejan llevar por lo que está de moda”, sostiene.
Fuente El Nacional
http://www.el-nacional.com/escenas/Youtube-libro-abierto_0_956904411.html